ARMONIA EN LA PAZ INTERIOR
La meditación es muy fácil. Cierra tus ojos. Imagina que estás acostado sobre la hierba, mirando las estrellas por la noche. Te sientes relajado y cómodo. Enfócate en el centro de tu abdomen e imagina que tienes una estrella dentro de tu cuerpo. Espera ahí hasta que tu mente se aclare. Puedes imaginar una manzana, una naranja, una burbuja o una toronja en el centro de tu cuerpo en vez de la estrella. Puedes visualizar cualquier objeto neutro, hasta que la imagen sea clara y evolucione por sí misma. Observa el objeto con facilidad y suavidad. Sólo tienes que darte una oportunidad. Has trabajado muy duro todo el día. Es el momento de tomar un descanso y darte una recompensa. Sólo relájate. A los pocos minutos de enfocar tu concentración, algo milagroso sucederá. Encuentra a ese ser inocente que todavía está dentro de ti. Medita con una mente abierta. Medita como si estuvieras en reposo. Debes sentirte cómodo al meditar. Destierra todas las emociones negativas. En tu vida d